Durante la adolescencia no están desarrollados completamente los aparatos, sistemas y órganos del cuerpo así como tampoco la instalación del cableado nervioso en el cerebro.
La ingesta de alcohol durante esta etapa de la vida puede afectar este proceso y traer riesgos y consecuencias:
– Falta de capacidad de la memoria.
– Efectos negativos a nivel cognitivo.
– Efectos neurotóxicos, particularmente en las áreas que involucran el control de impulsos.
– Pérdida de la voluntad.
– Estados psíquicos y mentales patológicos.
– Conductas de riesgo.
– Accidentes de diferentes tipos.
– Consumo con conductas adictivas.
La pregunta que los expertos recomiendan hacer a los adolescentes para detectar una situación de riesgo es: ¿Alguna vez perdiste la capacidad de tomar decisiones con claridad?
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